AL MAESTRO DE VOCACIÓN
Una noble vocación de servicio social escogiste,
enseñar, orientar y guiar es tu gran responsabilidad,
venciendo un sinnúmero de obstáculos que padeciste
a pesar del frío emolumento y la constante inestabilidad.
En muchos el arte y la cultura inspiraste,
en otros la ciencia y la investigación afianzaste;
un consejo, una sonrisa y un aliento fueron tus aliados,
el tiempo, la distancia, la ingratitud por ti fueron ignorados.
Esfuerzo, dedicación y esmero cada día has demostrado,
un gesto, un acto y una loa los discentes te han brindado;
evaluación, innovación y planificación siempre has propuesto,
ante la indiferencia, maltrato y abuso que el estado te ha impuesto.
Tal vez pocos reconozcan tu rol trascendental en la sociedad,
Tal vez muchos valoren el estratégico medicamento de tu labor;
pero siempre te has caracterizado por tu entereza y honestidad,
has educado demostrando dedicación, esmero y un incondicional amor.
Por tu silencioso y fructífero trabajo,
por tu colosal sueño de transformar mentes,
por tu indesmayable empeño de inspirar y cultivar grandes sueños.
A ti te rindo un merecido agasajo,
a ti te erijo como una de las labores más relucientes,
a ti te digo ¡FELIZ DÍA! educador de adolescentes y pequeños.
Poel Rufino Herrera Bendezú.
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