DEBATE SOBRE LEY UNIVERSITARIA

¿Una ley mejorará la calidad 

universitaria?

En estos últimos días se han tejido una serie de controversias en torno a la nueva Ley Universitaria. Eso es positivo, tan importante porque la formación educativa de los ciudadanos debe estar por encima de muchos temas triviales. Existen datos contundentes que desacreditan la calidad de la universidades en el país: se realizó un ranking  del nivel de investigación de las universidades de Latinoamérica y este es el resultado "En el caso peruano, ninguna universidad se ubica entre las 100 primeras, siendo Cayetano Heredia la mejor posicionada (puesto 155°)".  Otro dato contundente es que ninguna universidad peruana está entre las 500 universidades del mundo que forman con calidad. Además somos testigos de las denuncias constantes de rectores que hacen lo que quieren con la administración de moradas intelectuales superiores. Entonces ¿Debemos seguir con el mismo sistema de formación? ¿Necesitamos cambios? 

El debate se ha trivializado, fruto de la insipiente necesidad por los temas cardinales. Por ejemplo un seudo periodista acusa a los congresistas de burros, que no tiene la autoridad moral ni intelectual para aprobar esta ley. Otros, reflexionan sobre la ínfima calidad y eficiencia de este gobierno frente a temas de esta envergadura. Sin embargo, el tema medular es mejorar la calidad de la formación universitaria ¿Una ley podrá cumplirnos el milagro?

Necesitamos mejorar formación de los catedráticos, pero solo se exige que cuenten si quiera con una maestría, pregunto ¿La obtención de maestrías en el Perú asegura una formación de calidad de un maestro? Me parece que es caer en el círculo vicioso de ver a la educación como un negocio. Se exige mayor investigación. Sin duda este es el talón de Aquiles de la universidades peruanas; se propone tesis universitaria y obtener el grado de Bachillerato con una tesina. Acertada medida porque son las universidades las que deben ser el centro de las innovaciones, descubrimientos, propuestas y proyectos para superar los problemas del entorno. Sabido es que en la formación universitaria no se encuentran tesis sobresalientes que modifique o complemente el conocimiento científico, económico o social ¿existe alguna investigación que haya trascendido en el mundo intelectual últimamente?.

En el país existe aproximadamente 139 universidades, muchas de ellas se han proliferado por arte de magia con sus sedes en todo el país y se sigue aperturando nuevas sucursales. Somos testigos del negocio de la "formación universitaria" pero existe calidad de servicio, no. En consecuencia, se debe regular la emisión de licencia de funcionamiento y aquí entra a tallar la Acreditación de la Universidades, si una universidad no reúne los requisitos básicos, simplemente debe ser relegado o no se le debe dar luz verde, pero ¿Se cumpliría esta norma? Genera duda porque estamos acostumbrados al clima de la informalidad, la ley de la criollada, la ley del favoritismo, etc. Necesitamos que las universidades sustenten que promueven la investigación, cuentan con maestros que investigan y contribuyen al desarrollo intelectual con publicaciones, existe facultades muy bien implementadas, existe una administración eficiente sin rastros de corrupción, etc ¿será posible lograr estos estándares?

Se quiere eliminar la ARN, que debe existir un ente que converja a todas las instituciones debe prosperar, pero no como único ente de regulación y decisión. Miren los precedentes. Basta con una pregunta ¿Las universidades nos ofrecen un servicio de calidad, incluida las privadas? Sin duda debe existir un órgano de regulación de las universidades, se propone al MED con una Superintendencia que podría utilizar políticamente a las Instituciones de formación superior, puede ocurrir; entonces necesitamos un organismo independiente que regule la calidad de la administración, la innovación del currículo, por cierto uno de los más desfasados del mundo, evaluar los estándares de calidad. 

Entonces aquí convergen varias situaciones que   requieren decisiones no solo  a nivel legislativo, sino a nivel político, económico y sobre todo, moral. Todo ciudadano debe asumir su rol en nuestra comunidad con real conciencia y eficiencia para poder superar nuestras taras y limitaciones.

PROF. POEL RUFINO HERRERA BENDEZÚ